Esta es mi historia. Soy Alexander, nací y crecí en Colombia durante los primeros once años de mi vida, crecí en una familia disfuncional que carecía del amor de un padre y con un enorme deseo de supervivencia de una madre soltera. Sabía quién era mi padre, pero cuando tenía tres años, ya no era más parte en mi vida. De niño, inconscientemente me hice cargo de muchos miedo inconsciente de mis padres, lo que resultó en tener que vivir los primeros dos años y medio enfermo.
Di con la suerte de encontrar cura y a los dos años y medio, me operaron de las amígdalas y mi salud se regenero. De niño me sentía muy diferente a los demás niños; No quería aprender cómo otros niños, mi desarrollo no fue fácil dado a que fui maltratada. Por esa razón aprendí a apagar mis sentimientos. Para sobrevivir aprendí a adaptarme a mi entorno y a las situaciones. Además, me iba a dormir todas las noches con el mayor de los miedos, con miedo de volver a mojar la cama. Este pensamiento fantasmea todas las noches en mi mente, hasta cumplir diez años.
Cuando tenía diez años, mi madre se casó con un Holandés por un futuro mejor. Dejamos mi entorno familiar en el cual crecí y también dejamos a mi familia para mudarnos a Holanda. En este periodo de mi vida, me sentía muy solo. Pues ni mi madre, ni mi padrastro estaban presentes en mi crianza. Mi madre en ese momento luchaba por su salud, por lo que ese momento no se encontraba presente y mi padrastro estaba ocupado con todo tipo de cosas, excepto con la responsabilidad que tenía con nosotros.
Tuve la suerte de que en esos momentos difíciles encontré mi pasión por querer entender la vida. Mi alma y espíritu sonaban con libertad . Quería alcanzar la libertad de una mente cautiva, que estaba preprogramada para sufrir, y estaba llena de creencias y condicionamientos. Encontré esa libertad en la naturaleza.
La naturaleza siempre ha sido mi gran amiga. Recuerdo mirar por la ventana a los pájaros y pensar: «Quiero ser libre y ágil como un pájaro». A menudo, en momentos difíciles, mi intuición era mi brújula que guiaba la sensación de estar constantemente perdido. Mi pasión y mis talentos siempre me han acompañado y ayudado a superar los momentos difíciles. Uno de mis talentos es la capacidad de conectar (con) personas. Esto me ha ayudado a menudo a hacer de diferentes mundos extraños mi hogar.
Supe que estaba en casa donde se está mi corazón. Sin embargo, cuando tenía quince años, sufrí un colapso y ya andaba con preguntas existenciales. Tenía que haber más en la vida de lo que mis ojos físicos podían percibir. Este momento catártico fue una gran oportunidad para escuchar mi brújula interna (mi corazón) y dejarme guiar por el amor divino y la sabiduría de todo lo que es.
A partir de entonces, usé esta catarsis como una oportunidad para alimentar mi mente y mi cuerpo de la inmensa hambre espiritual que tenía. Empecé a estudiar técnicas milenarias como Reiki, Raya Yoga, Mindfulness, donde empezó mi viaje interior y camino de autoconocimiento y sanación que no ha parado desde entonces.
La vida siempre me ha premiado por el espíritu fuerte que tengo. He tenido la oportunidad de conocer a mentores maravillosos que fueron cruciales para el camino de mi vida y mis elecciones en este. He podido conocer a muchas personas hermosas de todo tipo de orígenes y diferentes partes del mundo. Donde, a pesar de la diferencia de idiomas, siempre hemos logrado hablar el idioma del otro: «¡El idioma del corazón!» A pesar de las muchas lágrimas que he derramado, nunca he perdido la fuerza y la esperanza.
ISHUA es mi nombre cósmico que puedo propagar y me gusta compartir con el mundo. Esta es la esencia que llevo para cumplir mi misión de vida. Ishua significa trinidad, o la llama de la trinidad. Esta unidad está representada por tres colores: rosa, dorado y azul. Rosa representa el amor incondicional. El oro representa la sabiduría dentro de nosotros mismos. Y el azul representa el poder del YO SOY (tú que estás conectado al vasto cosmos). NA significa iniciador de fuego. Libertador de tus propios talentos y dones.
Mis orígenes son desde los principios de PACHAMAMA o incluso más antiguos, cuando todo era polvo de estrellas. Escucho su llamado a elevarnos en nuestra verdad y luz. En este momento crucial en el que vivimos, es importante recordar quiénes somos esencialmente.
Aparte del (EGO), aparte de nuestras personalidades, directamente a lo que somos en esencia. Ha llegado el momento de realmente escucharnos a nosotros mismos.
Estoy aquí como el guardián de la tierra y hoy SURGE EN MI PODER, LUZ Y AMOR. Junto con ustedes, ayudaremos a restablecer el equilibrio de la Tierra y elevaremos la Tierra a su plano superior.
ISHUANA es un lugar de conexión, un lugar para relajarse y florecer. Es un lugar para evolucionar hacia la mejor versión de nosotros mismos. Sea bienvenido, y co-creemos juntos.